Soy Layla, fotógrafa de familias y niños, y mi misión es ayudarte a guardar lo que el tiempo no perdona: los momentos que más amas. ¿Sabías que en el primer año de vida tu bebé crece más que en cualquier otra etapa de su vida? en tan solo 12 meses va a triplicar su peso, va a pasar de tener movimientos reflejos a sentarse solito, gatear e incluso dar sus primeros pasos, sonreirá, balbuceará sus primeras palabras y descubrirá el mundo por primera vez. Y todo va a pasar en un abrir y cerrar de ojos. ¿No crees que todos esos instantes merecen ser convertidos en recuerdos que duren para siempre? Estas sesiones son tan especiales porque no se trata solo de fotos, sino de su historia, que podréis revivir una y otra vez. Y os aseguro que en pocos años sentiréis la necesidad de volver a esos momentos. Hagamos juntos una sesión que se convierta en una herencia emocional para tu familia.


Cuéntame qué tipo de sesión te gustaría y te contactaré en poco tiempo.